martes, 24 de mayo de 2011

Érase una vez la democracia (y III)


Capítulo 9
El legado de Antígona
Poco a poco, algunos ciudadanos con capacidad crítica ante tamaña injusticia, ante tanto desfalco y descontrol de los recursos, ante tanta mentira, ante el abuso de poder, ante tamaño robo a manos abiertas de las economías familiares, ante los privilegios de políticos, banqueros y
chorizos de altos vuelos, se dispusieron a reflexionar sobre el futuro que les espera a varias generaciones de jóvenes y cómo recuperar el derecho a una vivienda digna y a un trabajo que se supone la Constitución les ampara poder obtener. Tal y como nos enseñó Sófocles con el mito de Antígona, existen leyes injustas ante las que es legítimo desobedecer. Pero el sistema tan
perverso que nos han inoculado no vende leyes injustas sino un sistema que las reinterpreta y aplica en beneficio de las élites. No culpemos a las teorías de las malas prácticas.
Y el ciudadano harto ya se dispuso a pensar, concienciarse, a reflexionar y plantear que el derecho a la Democracia hay que ganárselo y además de defenderlo tal y como las familias cobijan y protegen a sus miembros desde que nacen lo mismo deberían hacer los ciudadanos con la familia social que representa una Democracia acogiéndose al derecho pero asumiendo los deberes.
Capítulo 10
Democracia Real Ya
Colorin colorado este cuento no se ha acabado ¿Te animas a acabarlo?

domingo, 22 de mayo de 2011

Érase una vez la democracia (II)


Capítulo 6
No hay más ciego que el que no quiere ver
Adormecida la ciudadanía, perezosa de movilizarse por las injusticias sociales, agazapadas en su madriguera del espejismo del bienestar en sus Centros Comerciales, en los concesionarios de coches, en los templos del ocio, en las rutas del fin de semana con alcohol y drogas non stop, en el confesionario de la caja tonta como exculpador de conciencias, con las audiencias de la telebasura en el altar de los records guiness y a gustito entre los brazos del Morfeo de la cultura enlatada, casposa y ridículamente disfrazada de falso underground…llegó la incapacidad (que no discapacidad) visual de la que nos habló José Saramago en su “Ensayo sobre la ceguera”. No hay más ciego que el que no quiere ver.
Capítulo 7
Hacia el fundamentalismo democrático
El rumbo de los intereses de un gobierno compuesto de siniestros personajes fascistas, herederos del franquismo, asesinos con las manos manchadas de sangre, hooligans del ultraliberalismo económico y amiguetes de la feria inmobiliaria y el ayuntamiento prevaricador, quisieron hacer creer que unas supuestas armas de destrucción masiva estaba en poder de un loco allá por el Próximo Oriente.
Quisieron construir un enemigo a medida de sus intereses (que ellos mismos ayudaron a EEUU a crear y dotarle de la mejor tecnología armamentística). Quisieron construir un logos perverso con la abyecta complicidad de los medios de comunicación, una manipulación semántica de la expresión “Condeno la violencia” (se condena el terrorismo de ETA pero no se verbaliza la condena del terrorismo y matanza de civiles palestinos por parte del gobierno – no del pueblo- israelí).
Quisieron engañar a la ciudadanía un 11 de marzo de 2004 pero no lo consiguieron. Y ésta creyó liberar al pueblo del yugo de unos intereses partidistas para ceder el poder a otro gobierno que no hizo más que perpetuar el camino que inició el que le precedió. Un camino que desfiguraba la Democracia, una Democracia que se convertía en fundamentalista a imagen y semejanza de Al-Qaeda, los seguidores de Cristo Rey o de las sectas religiosas.
Capítulo 8
www.estadodederecho.paf
El viaje de aquel país que le llevó de la dictadura al fundamentalismo democrático facturó el equipaje del parlamentarismo como mercancía de compraventa de votos, quedando en el limbo de las ideologías, a merced de los dueños de la riqueza. La pérdida de este equipaje tuvo una atención al cliente sorda ante la razón crítica de quienes pedían auxilio por un altavoz con mute activado. El Estado de derecho destrozado, anulado, acorralado, se acerca el final de partida.
Game Over.
Insert coin para continuar.

sábado, 21 de mayo de 2011

Érase una vez la democracia (I)

Capítulo 1

El nacimiento de una mentira
Erase una vez un dictador asesino y criminal que dio plenos poderes a un príncipe discípulo de Maquiavelo. Le ofreció mantener los privilegios en un reino necesitado de las ayudas estructurales de la Unión Europea a cambio de ceder el control a las mismas familias políticas y financieras que le habían perpetuado en el poder. Para ello se ayudó de una tómbola amañada llamada Transición a la Democracia (que no democrática), y así escenificar una farsa y otorgar al pueblo el premio de la muñeca pepona de la libertad.
Y con ello, el príncipe tuvo una hija a la que llamó Democracia Parlamentaria.
Capítulo 2
El jefe de todo esto
Aquel príncipe, vistió en las mejores galas de las cortes europeas y mundiales para ofrecerse como ejemplo del mejor garante de los derechos civiles. Aquellas cortes que conformaban el Imperio del Mal con la ayuda inestimable de la CIA desde su sede operativa en Langley (Virginia), gobernaban el mundo y monitorizaban la producción de armas, de drogas, de ordenadores, de automóviles, de aparatos electrónicos, así como la gestión de las Bolsas, de redes de prostitución, la explotación infantil y dictaban las leyes del pensamiento único a través de los medios de comunicación.
Así fue que el Fondo Monetario Internacional, las incipientes bancas islámicas que controlaban el negocio del petróleo, la Banca Mundial, la Banda de Bildelberg y diversos freelances expertos en gangsterismo financiero dieron unas palmaditas al príncipe con el fin de establecer el bipartidismo político, obediencia plena a la Constitución y la bendición al dictador que tantas muertes y sufrimiento causó. De la mentira nació el jefe de todo esto, un rey absoluto.
Capítulo 3
Silencio, se rueda
Pero en aquel reino, ciudadanos con pensamiento propio quisieron una sociedad más justa, equilibrada y transparente. Familias enteras de obreros, asociaciones de vecinos, sindicatos que no querían obedecer a la patronal de empresarios, organizaciones de mujeres valientes y luchadoras o colectivos representantes de otras formas de pensamiento, tendencia sexual o cultural que defendían su identidad a través de su cultura, su lengua, su idea de pertenencia a una comunidad o creencia religiosa, dispusieron de la calle como escenario para rodar una historia con derecho real a cameo.
Tanto miedo produjo en los garantes de la Democracia a perder su “status quo” que pusieron en práctica un maquiavélico plan que anulara todas aquellas iniciativas valiéndose en algunos casos de la violencia, de la censura, del mobbing social y en casos extremos de terrorismo de estado llegando a asesinar. En resumen, se silenció todo para no rodar una película que consideraban agitadora de conciencias.
Capítulo 4
¿Qué hemos hecho para merecer esto?
Una vez establecido el pensamiento único y fracturado el vínculo con toda moral social y política, un partido supuestamente de izquierdas destrozó todo el tejido industrial del país abocando a miles de familias al paro y con ello a un holocausto de la pobreza, la desesperación, la humillación y un callejón sin salida. A ello ayudó mecanismos de desactivación de iniciativas de miles de jóvenes con la entrada de la heroína en todos los suburbios de las grandes ciudades.
La población también quedó a merced de luchas políticas e identidades asesinas en manos de terroristas como ETA o el GAL y sometida al miedo de un sistema penitenciario y policial no muy alejado del sistema represivo de la dictadura.
Los responsables de todo eran como los “Diez negritos” donde todos parecían ser culpables o inocentes en una red de coartadas que implicaban o descartaban como si fuera una reunión de trileros en hora punta en las Ramblas de Barcelona.
Capítulo 5
Es la economía estúpido
Así pues, una vez vendido el sector agrario a las políticas de control de la Unión Europea, destrozado el tejido industrial y con media población en el límite del subdesarrollo, se iniciaron proyectos y políticas para convertir el país en un baúl cerrado de economía de servicios dependiente del turismo y el mercado del ladrillo que ayudó a mejorar la economía de muchas familias. Éstas creyeron que la mejoría era producto de la Democracia, de un sistema económico fuerte, que el país y sus ciudadanos eran el no va más y que se construyó una Democracia Real en tiempo record sin haber tenido más referentes que cuarenta años de dictadura, siglos de opio catolicista y alguna escapada a los cines eróticos de Perpignan.
¿Cómo era posible tener todo lo que se deseó y por duplicado? Coches, teles, ordenadores, dos residencias, ganancias económicas gracias a la especulación inmobiliaria, obtención de créditos en blanco…vivir por encima de las posibilidades! ¿Cómo era posible? Es la economía estúpido.